¿Por qué un pez se enferma si los demás parecen bien?
Erradiquemos esta idea: “Si todos los goldfish están bien, ¿por qué uno se enfermó? Seguro fue
casualidad.”
¡FALSO! En un acuario cerrado, todos los peces comparten
el mismo entorno: misma agua, misma carga biológica, mismos niveles de
toxinas y mismos microorganismos. Que uno enferme es una señal de alarma,
no un caso aislado.
¿Por qué puede enfermar uno primero?
- Distinto nivel de inmunidad: Un pez más débil, estresado o recién introducido será el primero en mostrar síntomas.
- Daño silencioso: El amoníaco y los nitritos son invisibles pero afectan branquias y órganos internos aunque los síntomas no sean inmediatos.
- Resistencia engañosa: Los goldfish son fuertes y pueden tolerar malas condiciones por semanas antes de evidenciar problemas.
Consecuencias de ignorar a un pez enfermo
- Propagación de enfermedades: Bacterias, parásitos o hongos pueden extenderse al resto del acuario.
- Deterioro del agua: La descomposición y el estrés aumentan parámetros tóxicos silenciosamente.
- Alta mortalidad: Ignorar un solo caso puede desencadenar pérdidas masivas en poco tiempo.
Mensaje clave
Si un pez muestra signos de enfermedad y los demás parecen sanos, es momento de actuar:
- Revisar parámetros de agua: Amoníaco, nitritos, nitratos, pH y temperatura (los peces son la mejor medición, más allá de los tests).
- Observar signos sutiles: Cambios mínimos de comportamiento o apetito en otros peces.
- Verificar filtración y residuos: Asegurar buen funcionamiento del filtro y retirar acumulaciones.
- Refuerzo bacteriano: Considerar agregar bacterias nitrificantes y probióticos si es necesario.
No normalices la enfermedad ni las pérdidas. Normaliza buscar la causa y actuar a tiempo.